Jobabo.- Representantes locales de la Asociación Cubana de Limitados Físico-Motores (Aclifim), la Asociación Nacional de Sordos de Cuba (Ansoc) y la Asociación Nacional de Ciegos y Débiles Visuales (Anci) se reunieron con directivos y especialistas de organismos locales para evaluar la atención que reciben sus asociados con el objetivo de buscar soluciones a problemas que inciden directamente en su inserción social, condiciones de vida, y la atención comunitaria e institucional.
La cita, que forma parte del seguimiento local al Acuerdo 9040 del 2021 del Consejo de Ministros, permitió examinar los compromisos adquiridos en sesiones anteriores y revisar los acuerdos enfocados en la prestación de servicios y las prioridades de atención para los miembros de estas asociaciones, abarcando desde la asistencia social hasta el desarrollo de actividades culturales, recreativas y deportivas.
Un punto central de la agenda fue la persistente situación de las barreras arquitectónicas en la vía pública y en los accesos a inmuebles institucionales, sobre lo cual los participantes coincidieron en la necesidad de identificar los sitios más frecuentados por las personas con discapacidad que requieren con urgencia una transformación para garantizar la accesibilidad. En tal sentido se orientó priorizar estas acciones para facilitar la movilidad y el acceso a servicios esenciales.
Asimismo, se abordaron casos específicos de asociados que necesitan una intervención más directa y personalizada de los servicios de asistencia social, ratificándose que la atención a estas situaciones debe ser una prioridad fundamental para los trabajadores sociales y los grupos de trabajo comunitario, con el fin de brindar soluciones efectivas a problemáticas individuales.
La reunión también dedicó un espacio a analizar la problemática relacionada con el uso indebido del carné de discapacitados en circunstancias que no lo requieren, tema sensible que fue tratado con el objetivo de preservar la integridad del documento y garantizar que los beneficios asociados al mismo estén dirigidos correctamente a quienes realmente los necesitan y no vayan en detrimento de sus deberes, derechos y la vulnerabilidad de personas no integrantes de sus asociaciones.
Paralelamente, se discutió sobre el comportamiento social de los asociados, enfatizando la importancia de conocer y cumplir tanto con sus derechos como con sus deberes dentro de la sociedad, lo cual generó un buen debate que buscó promover una convivencia responsable y una participación más activa y consciente de todos los miembros.
El encuentro concluyó con el compromiso de dar continuidad al trabajo coordinado entre las asociaciones y las instituciones locales. Se reafirmó la voluntad de seguir perfeccionando los mecanismos de atención para avanzar en la mejora de la calidad de vida y la plena inclusión de las personas con discapacidad en la comunidad.