Contrario a todo pronóstico, durante el paso del Huracán Melissa por territorio oriental ninguna de las instalaciones científicas ni los ecosistemas del Refugio de Fauna Monte Cabaniguán tuvieron afectaciones. Esta área protegida situada al sur de Jobabo y uno de los principales referentes mundiales de la investigación de la Flora y la Fauna, en especial del cocodrilo Acutus, se mantiene inalterable, confirmó el biólogo Manuel López Salcedo, luego de un recorrido por la zona.
Ello coincidió con la lejanía de la franja de fuertes vientos del referido evento hidrometeorológico y la marea baja, un aspecto clave que el experto definió como esencial ante el oleaje intenso y las fuertes marejadas que se esperaban en la línea costera, además del resguardo natural que ofrecen los manglares y toda una red de esteros que se entretejen en el humedal.
Dos días antes del paso de Melissa, en entrevista con López Salcedo, alertaba que de propinar daños, los efectos inmediatos se verían en los avances que ha tenido el trabajo de conservación de especies de la flora y la fauna en la zona, la reducción de las poblaciones de especies, aves fundamentalmente, y una transformación paisajística del entorno.
Explicó que además del impacto ambiental y científico, habría un efecto económico, debido a que se tendrían que posponer la captura de Sevilla (un ave acuática), de interés comercial en el mercado internacional, siendo Monte Cabaniguán un potencial suministrador.
Además de los factores naturales que propiciaron que no existieran afectaciones en el área protegida Monte Cabaniguán, la experiencia del personal científico y de apoyo fue esencial para asegurar en días previos todos los recursos y medios, y adoptar otra medidas de contención esenciales en las estaciones biológicas.



