Jobabo.– Un cambio significativo en la contratación agropecuaria para 2026 comenzará a implementarse a partir de la próxima semana en las bases productivas de Jobabo con la novedad de que las más de 250 personas que se encuentran en trámites de usufructo y que una vez hayan obtenido el visto bueno de las juntas directivas de las cooperativas a las que se asociarán, podrán recibir la declaración de “administración temporal” de la tierra.
Esto les permitirá comenzar a explotar las parcelas de inmediato y, lo más importante, ser sujetos de contratación formal, integrando su futura producción a los planes de entrega.
La medida, anunciada aquí por el Delegado Provincial de la Agricultura, Alcides Aguilar Carranza, tiene un impacto directo y cuantificable en la capacidad productiva del municipio estimándose que la incorporación de estos nuevos usufructuarios elevará el número total de tenedores de tierra que aportan a la economía local y a la vez, un crecimiento en los potenciales a contratar, sobre todo en los cultivos varios.
Actualmente, este número se ubica en más de 2 mil 600 productores distribuidos en las 28 formas productivas de Jobabo por lo que se espera que este incremento fortalezca significativamente los diferentes renglones que abastecen tanto el consumo local como las demandas de las entidades comercializadoras, en un momento donde se requiere maximizar la producción agropecuaria.
Ante esta expansión, las autoridades del sector han insistido en la necesidad de agilizar la conciliación del potencial productivo, señalando que es fundamental que exista una sincronización perfecta entre lo declarado por las cooperativas y los datos contenidos en el Registro de la Tierra y el CENCOP.
Esta información es la base para una planificación realista y eficaz, evitando duplicidades o subregistros que puedan entorpecer la ejecución de los planes y por consiguiente, el propio proceso contractual.
Paralelamente, los directivos han enfatizado la urgencia de revisar otras situaciones que generan distorsiones en la tenencia de la tierra poniendo el foco en dos casos específicos: los asociados a cooperativas que mantienen trámites de herencia sin resolver y, de manera particular, aquellas personas que actualmente se mantienen en un estado de ilegalidad, produciendo en terrenos dentro del radio de acción de las cooperativas sin estar vinculados a ninguna forma de entrega oficial.
Regularizar estos casos es visto como un paso esencial en una estrategia integral para optimizar la base productiva de Jobabo, e institucionalizar y dar seguridad jurídica a los productores.
El éxito de esta campaña de contratación 2026, con plazo del 15 de diciembre, dependerá en gran medida de la celeridad y eficacia con que se implementen estos procesos de manera coordinada, para arrancar en enero en una situación diferente a lo que sucedió en el actual calendario, que vinieron a concluir las firmas finalizando el primer trimestre de 2025.