El proyecto IRES impulsa la creación de fincas integrales como parte de su eje central y objetivos de transformación paisajística y fomento forestal en el municipio.
Según precisó Pedro Rodríguez, director del programa en la localidad, la iniciativa busca una incorporación más amplia de productores que cuenten con experiencias en la gestión silvícola, considerando su conocimiento vital para el éxito del proyecto.
Actualmente, el proyecto en Jobabo se sostiene sobre tres variantes principales: la siembra combinada de cedro con plátano, el desarrollo de frutales y los sistemas silvopastoriles. No obstante, la visión integral de IRES pretende abarcar más aristas que vinculen la gestión de los bosques con una diversidad de actividades productivas agrícolas, enriqueciendo los modelos de uso de la tierra.
Rodríguez enfatizó que IRES no se limita a la ejecución práctica, sino que se fundamenta en un proceso de capacitaciones previas para los productores. Estas formaciones definen oportunidades concretas para el desarrollo forestal y el cambio paisajístico en los entornos rurales del territorio, asegurando que las acciones se realicen con una base técnica sólida.
La mayoría de las unidades productivas de Jobabo están ya implícitas en esta estrategia, lo que demuestra la integración del proyecto en la estructura socioeconómica local. Este amplio nivel de participación es crucial para lograr un impacto significativo y duradero en la restauración y el manejo sostenible de los paisajes del municipio.
Con esta apuesta, el proyecto IRES se consolida como una estrategia holística que combina la producción agrícola con la sostenibilidad ambiental e iniciativas que mejoran la cubierta forestal en Jobabo.



